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Has decidido embarcarte en tu propio proyecto pero tienes dudas acerca de cómo es mejor hacerlo, si solo como trabajador por cuenta propia o creando una sociedad.
Las diferencias entre crear una empresa o ser autónomo solamente son notables, al igual que las características de cada una de las formas jurídicas. Lo que puede ser muy bueno para uno, quizás no sea lo mejor para otro.
Venga, vamos a verlo todo para sacarte de dudas 😉
Para tomar bien la decisión entre comenzar como autónomo o crear una empresa, lo mejor es conocer bien las características y diferencias de cada uno de ellos.
La responsabilidad del autónomo es ilimitada. Esto quiere decir que responde de las deudas de la empresa frente a terceros con todo su patrimonio personal, ya que no existe una separación entre patrimonio empresarial y personal. Esto conlleva un gran riesgo y es una desventaja de ser autónomo.
En una empresa la responsabilidad se limita únicamente a la aportación que se haya hecho a la sociedad, que responde de las deudas con su propio patrimonio.
El proceso de constitución del autónomo es fácil y barato. Únicamente tendrás que darte de alta en la Agencia Tributaria y en la Seguridad Social. Todos los trámites pueden estar hechos en un mismo día.
Para operar como sociedad, previamente hay que pasar por el notario y el Registro Mercantil, incrementándose el tiempo y el precio de los trámites. Necesitarás entre 5 y 30 días para constituir una sociedad limitada y suele tener un coste de unos 400€.
La contabilidad del autónomo es más sencilla que la de la sociedad. Por ello, los costes de gestoría son también bastante más bajos cuando se trata de una persona física que de una jurídica.
Además, los nuevos autónomos pueden aplicarse la tarifa plana en la cuota de autónomos durante el primer año y de bonificaciones durante el segundo.
Los autónomos societarios también pueden beneficiarse de la tarifa plana, aunque la mensualidad es más alta.
Para la creación de una sociedad limitada o anónima hay que aportar un mínimo de capital social. En el primer caso de 3.000€ y en el segundo son 60.000 (aunque es posible hacerlo con un solo euro cumpliendo ciertas condiciones). Este dinero habrá que depositarlo en el banco para después poder hacer uso de él.
En el caso de los autónomos no es necesario hacer ninguna aportación.
La forma de tributar en uno y otro caso es completamente distinta.
El autónomo paga principalmente el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Es un impuesto progresivo, en el que se paga más o menos en función de los ingresos que se hayan tenido, pudiendo llegar a pagar hasta un 47%.
Las empresas, en cambio, tributan en el Impuesto de Sociedades (IS). En este tributo se paga un 25%* sobre los beneficios obtenidos en el ejercicio.
*25% es el tipo general, pero hay otros.
A la hora de acceder a créditos bancarios, lo más habitual es que las sociedades tengan más facilidad que los autónomos.
Esto es así porque a las entidades financieras les dan más confianza económica, aunque por norma general suelen pedir aval o garantía.
A la hora de ofrecer los servicios a los clientes o de buscar nuevos nichos de mercado, la imagen es fundamental.
Una empresa transmite una imagen más profesional y solvente que un autónomo. Esto hará que muchos clientes se decanten por este tipo de formas jurídicas a la hora de escoger sus proveedores.
Las cosas cambian y las empresas también.
Hay que tener en cuenta que para hacer cambios en una sociedad hay que llegar a acuerdos con todos los socios y hacer una nueva escritura ante notario. Esto se hará así siempre que sean aspectos que afecten a los estatutos de la sociedad, como el domicilio, las actividades o el administrador de la sociedad.
Los autónomos no deben preocuparse de esto. No tendrán la obligación de hacer estos cambios de forma pública.
Cuando se quiere comenzar una actividad con alguien más, lo mejor es tenerlo todo lo más claro posible.
Por eso, en estos casos suele optarse por crear una sociedad en la que haya una seguridad jurídica para todos. Así, los acuerdos y la toma de decisiones tendrán un procedimiento, al igual que la forma de administración y el reparto de beneficios.
Si se hace como autónomos existe más inseguridad o habrá que hacer un contrato entre varios autónomos.
Pero qué lío…sigo sin saber si es mejor crear una empresa o ser autónomo.
Por un lado, ser autónomo es sinónimo de inseguridad. La responsabilidad es total, así que si tienes deudas puedes acabar teniendo serios problemas. Además, acceder a financiación es casi imposible y la imagen que se transmite a los potenciales clientes puede no ser la mejor. Eso sí, el proceso de constitución es sencillo y económico, su gestión también y es posible acogerse a la tarifa plana.
Por el otro, la sociedad transmite seguridad y buena imagen para los clientes. El acceso a la financiación será más fácil y la asociación con otras personas es más segura. En cuanto al proceso de constitución es largo y costoso y hay menos flexibilidad a la hora de los cambios.
Así que, como conclusión y consejo, lo mejor sería empezar como autónomo, salvo que comiences ya con un equipo de varios trabajadores, con una estructura organizativa complejo, o tengas garantizados unos grandes beneficios de inicio por tener ya apalabrado contratos con clientes antes de iniciar la actividad.
No asumes el riesgo de una gran inversión para su constitución y los trámites son sencillos. Es verdad que los impuestos pueden llegar a ser elevados pero, si llegas a una facturación más alta, siempre podrás constituir una empresa para seguir con tu actividad. Así, te beneficiarás de la tarifa plana y podrás comenzar tu actividad con flexibilidad.
Ya tienes toda la información sobre las ventajas e inconvenientes de crear una empresa o ser autónomo. Ahora eres tú el que tienes que tomar la decisión que mejor se adapte al negocio que quieres poner en marcha.
Lo que sí que te aconsejaremos siempre es contar con profesionales como los de Openges, con conocimientos y experiencia relacionada con todos los trámites y gestiones necesarios para la puesta en marcha de una empresa. Así, estarás seguro de que todo se ha hecho bien y de que tu negocio está en buenas manos 😊