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Los Riesgos psicosociales en el trabajo en el foco de las Inspecciones

28 de abril de 2021
Los Riesgos psicosociales en el trabajo en el foco de las Inspecciones

La Inspección de Trabajo y Seguridad Social acaba de publicar un nuevo criterio relativo a los distintos tipos de riesgos psicosociales en el entorno laboral. Aunque no es nuevo, su publicación supone la actualización y el refuerzo de las competencias que el organismo tenía sobre el control de determinados factores que pueden poner en riesgo la salud emocional del profesional.

El estrés, la ansiedad o el síndrome del trabajador quemado son algunas de las consecuencias derivadas de la falta de control de los factores de riesgo en la empresa.

¿Qué son los riesgos psicosociales?

Los riesgos psicosociales, en especial el estrés laboral, constituyen uno de los problemas más graves de seguridad y salud en el trabajo. La propia Agencia Europea señala en su comunicación Trabajo más seguro y saludable para todos que “más de la mitad de los trabajadores de la UE señalan que el estrés es habitual en su lugar de trabajo, y cuatro de cada diez consideran que no se gestiona bien”.

El nuevo criterio técnico de Inspección los define como “los hechos, situaciones o estados” surgidos por la forma en la que está organizado el trabajo y la cultura organizacional que pueden afectar de manera negativa a la salud del empleado

Tipos de riesgos psicosociales

La publicación también establece una clasificación de los factores de riesgo psicosocial que afecta a la salud laboral:

  • Monotonía, tareas sin sentido, fragmentación, falta de variedad, tareas desagradables por la que se siente rechazo.
  • Carga de trabajo excesiva o insuficiente, presión de tiempo, plazos estrictos.
  • Horarios demasiado largos o que resulten impredecibles, conexión continua al trabajo, trabajo nocturno, a turno.
  • Falta de participación en la toma de decisiones, falta de autonomía o de control sobre el trabajo.
  • Comunicaciones deficientes o apoyo insuficiente ante los problemas o el desarrollo personal.
  • Poner a disposición equipos inadecuados, mal mantenimiento, malas condiciones ambientales.
  • Aislamiento, malas relaciones con compañeros, conflictos, conductas inapropiadas como el hostigamiento o el acoso, relaciones adversas con usuarios o clientes, atraco.
  • Ambigüedad o conflicto de rol, responsabilidad sobre personas.
  • Escasa valoración social del trabajo, inseguridad en él, falta de promoción profesional.
  • Conflicto de demandas o exigencias surgidas de la interacción entre la vida personal y el trabajo.

Todos estos factores psicosociales deben ser evaluados por el empresario y la labor de la Inspección de Trabajo es la de vigilar que efectivamente se está cumpliendo con la evaluación.

¿Qué hacer tras una evaluación de riesgos psicosociales?

Se deben de tomar una serie de medidas preventivas cuyo objetivo esté enfocado en evitar riesgos psicosociales en la empresa y  se articulan en tres grupos:

  1. Medidas organizativas y primarias. Tratan de reducir o eliminar el factor de riesgo.
  2. Medidas de afrontamiento o secundarias. Están dirigidas al trabajador y su objetivo es que este adquiera los conocimientos suficientes como para afrontar los factores de riesgo a los que está expuesto.
  3. Medidas de rehabilitación o terciarias. Se establecen en el caso de que el trabajador haya sufrido daños en su salud como consecuencia de su exposición a riesgos psicosociales.

Le corresponde a la dirección de la empresa la prevención de los riesgos laborales y decidir qué medidas debe adoptar para minimizar o eliminar las consecuencias derivadas de los factores de riesgo. Una vez adoptadas, debe hacer un seguimiento de las mismas con el fin de verificar su cumplimiento y valorar su eficacia. El Instituto Nacional de Seguridad Social y Trabajo pone a disposición de las pymes la herramienta Evalua-T para la identificación de los riesgos psicosociales en la vida laboral de los trabajadores.

Tipos de actuaciones que puede realizar la Inspección de trabajo

Las actuaciones por parte de los inspectores pueden deberse a tres tipos de situaciones:

  1. Derivadas de la obligación de controlar la gestión preventiva de los riesgos psicosociales. Estas actuaciones de control pueden deberse a campañas de prevención, a denuncias o bien ser iniciativas de la propia Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
  2. Actuaciones motivadas por las denuncias de trabajadores que están expuestos a estos riesgos: estrés laboral, acoso, situación de violencia, salud física psiquica derivada del trabajo, agotamiento en el entorno social-laboral, etc.
  3. Por haberse producido daños o accidentes de trabajo motivados por la exposición de los empleados a los factores de riesgo.

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